Hugo Biolcati, titular de la SRA, inmediatamente después
de las elecciones PASO / 2011.
Tras las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) del domingo 14 de agosto de 2011, el titular de la Sociedad Rural arremetió contra los votantes y los opositores, e incluyó a los que lo habían respaldado. Luego de años de discursos que anunciaban el apocalipsis agrario, no tuvo vergüenza en reconocer que “al campo le va bien”.
Un Biolcati al que se le soltó la cadena, en su "sacro" despacho de la Sociedad Rural.
Un Biolcati al que se le soltó la cadena, en su "sacro" despacho de la Sociedad Rural.
Dijo que “cuando nos convenía, nosotros (los “ruralistas”) nos vendimos como el 15% del padrón, pero en realidad no llegamos al 8”. Admitió que “sí, a nosotros nos va bien”, pero hasta hace poco pontificaba que, con esta política, Argentina iba camino a quedarse sin trigo y sin carne. El 23 de julio, Biolcati cerraba su discurso en la Exposición Rural señalando: “Estoy seguro de que esta larga noche está llegando a su fin [...]. Pronto, todos juntos en las urnas, podremos devolver a la Patria los valores que fuimos olvidando”. Ahora el titular de la Sociedad Rural, tras las elecciones, admitía su desilusión con la oposición, “atomizada y sin propuestas”, y con la gente que concurrió a votar, que “mira a Tinelli y si puede pagar el plasma, no le importa más nada [...]. Esa gente votó a Cristina”.
Este es el Premio de la Iglesia Maradoniana que se ganó Biolcati en las elecciones de 2011.
También en la Exposición Rural presumía ante otros dirigentes empresarios: “Soy opositor, el campo se puede dar el lujo de ser opositor”, sosteniendo que “la oposición le presentó a la sociedad su cara más desagradable”, alianzas surgidas como “fruto de una ingeniería electoral con objetivos egoístas y personalistas”. En la misma tribuna de la Rural, pero en la inauguración de la Exposición 2010, Biolcati aseguró que “la sociedad ya no admite más este estilo crispado, arrogante y confrontativo” del gobierno de Cristina Kirchner, y lo reiteró desde entonces. El mismo dirigente rural admitió que “mucha gente de los pueblos y las ciudades que acompañaron al campo en 2008, sin tener idea de lo que era la Resolución 125, ahora nos dicen ‘bueno, muchachos, no sigan hinchando, si no les va mal’. Y sí, a nosotros nos va bien, y tenemos una oposición que no presenta ninguna propuesta, y ante la posibilidad de que la crisis económica internacional impacte acá, el ciudadano votó la continuidad del gobierno”.
Cristina Fernández de Kirchner, después de las elecciones PASO 2011.
Biolcati dijo esto en un desayuno de trabajo de la Asociación de Dirigentes de Empresas. Allí el tema excluyente era la lectura política de los resultados del 14, que le pegaron un sonoro cachetazo a las aspiraciones de la oposición por acabar con el ciclo kirchnerista. Entre esos aspirantes, Biolcati siempre se había mostrado como el más entusiasta. Y el más activo, además, por alcanzar esa meta. Nunca lo disimuló.
Biolcati y el particular "regalo" que le mandaron los de la Asociación de Dirigentes de Empresas en aquel día.
Biolcati y el particular "regalo" que le mandaron los de la Asociación de Dirigentes de Empresas en aquel día.
Pero, frente a los números que mostraron las urnas, el dirigente rural tuvo una reacción entre visceral, desbocada, confesional e indignada. Indignado con la oposición, partidos y alianzas que no supieron presentar, a su criterio, una alternativa para derrotar al gobierno. Y con los votantes, que eligieron la continuidad. No “el voto del campo”, ya que según su explicación “el productoragropecuario no votó a Cristina, pero tampoco pudo encontrar una oferta atractiva en la oposición y atomizó su voto, como lo hizo la mitad que no votó al gobierno”. “La que no acompañó (una propuesta opositora) fue la gente que apoyó la protesta del campo en 2008, esa gente votó a Cristina, no la del campo.
A partir de allí despotricó sin miramientos a ese segmento de la población, que fue la que sostuvo los cortes de rutas y concentraciones en el interior, golpeó cacerolas en Plaza de Mayo y barrios del norte de la CABA y colmó los actos que encabezaban orgullosos los cuatro jinetes de la Mesa de Enlace en la lucha contra las retenciones a las exportaciones. “Esa gente votó a Cristina, esa gente a la que no le importa que aparezcan casos como el de Schoklender ni que haya inseguridad”, se fue desmesurando Biolcati. “[…] Encima aparece Zaffaroni explicando que él no sabía que había prostíbulos en sus departamentos, pero a nadie se le ocurre preguntar cómo es que tiene 17 departamentos un juez de la Corte con lo que gana”.Biolcati con uno de sus sponsors: Eduardo "Padrino" Duhalde.
Ilustración Musical
A DESALAMBRAR - DANIEL VIGLIETTI